Pues un día más en el que ya se empieza a notar un poco el cansancio, sobre todo cómo van los chavales a la cama.

Buenas oportunidades para los monitores que estamos como los almonteños esperando a saltar la valla de las venganzas nocturnas aunque esto... Siempre lo negaremos.

Los entrenamientos de la mañana siguen a buen ritmo y trabajando sobre todo la técnica individual, pero por la tarde es otra cosa.

La competición es lo que les mola a los chavales, está claro, y hasta jugando al 3 en raya se montan unas lucha más que interesantes en las que los más pequeños se están caracterizando como la revelación de los juegos.

El taller de hoy ha sido el de las gominolas caseras, que creo que no van a llegar a casa. No os hagáis ilusiones, y por la noche la velada de los dioses.

Por lo demás, siguen comiendo como limas, jugando todo el día, y lo mejor para nosotros, llegando rotos a la cama. Huele a venganza!!!!

Pero esas cosas... Son de las que se quedan en el campus y lo negaremos toda la vida.